León es una ciudad espectacular, famosa por su catedral y por su cecina, pero también porque se respira todo el ambiente y la historia del Camino de Santiago. Precisamente una parada en el camino es lo que se puede y debe hacer en el Rúa 11, un pequeño y emblemático bar situado en el límite del Barrio Húmedo con el casco antiguo de la capital castellana.
Esta calle estrella y viva bulle de bares, tiendas y gente y hunde sus orígenes en los peregrinos franceses que hacían el Camino de Santiago y su nombre es testimonio de ello.
Atendidos por un personal cercano y atento, el ambiente del local es familiar y muy agradable. En nuestro caso, además, fue el perfecto oasis donde descansar de un tórrido día de agosto, lo que nos hizo imaginar lo que debe suponer hacer parada aquí para un peregrino.
Nuestra para para repostar comenzó con un
vermú Petroni acompañado por un aperitivo de la casa: una deliciosa cecina de vaca I.G.P. (1)
La carta es sencilla pero más que variada. Se divide en dos categorías más postres, que indican la esencia del lugar: picoteo y tostas en pan rústico. Nuestra elección comenzó con la
lengua de ternera curada con pimientos asados del Bierzo y con ua ración de
croquetas de cecina y queso, platos que repetiríamos sin dudar.
Estábamos de escapada en Burgos por lo que debíamos probar la morcilla de León. Ambas capitales poseen dos catedrales góticas que rivalizan en belleza y espectacularidad y, además, extienden su "guerra" particular al tema de la morcilla para deleite de sus habitantes y de cualquiera que visite ambas ciudades. La morcilla burgalesa es de arroz mientras que la leonesa de de cebolla. En Rúa 11 la sirven sin la tripa, en una especie de crema que se unta en pan rústico y puedes acompañar de manzana y piñones.
De las tostas, optamos por la de boletus y foei tras una encarnizada guerra dialéctica ya que nos seducían, y mucho, la de jamón con setas y ali oli, la de quesos variados con pera, nueces y miel y la de carrillera de cerdo ibérico al vino tinto, lo que indica que hayamos marcado el Rúa 11 como lugar al que hay que volver.
Al ser un lunes, muchos de los bares del Barrio Húmedo que teníamos en nuestra lista estaban cerrados. Nuestro propósito de hacer una breve ruta por el Mesón Jabugo, la Taberna Los Cazurros, el Rincón del Gaucho y el Rúa 11, se vio limitada a este último, de la que disfrutamos enormemente y de la que hemos de decir que no nos dolió en absoluto encontrarnos los otros establecimientos cerrados. Así que solo nos queda decir que volveremos.